Cuando un líquido se encuentra en estado metaestable, variaciones muy pequeñas en las condiciones pueden hacer que, de golpe, el líquido cambie de estado. Como sucede en el vídeo, el agua que se encuentra en la botella está a una temperatura muy baja pero solo se convierte el hielo al salir al exterior y sufrir una alteración en su metaestabilidad.
7. Supercalentamiento
Otro ejemplo clásico de metaestabilidad es el que sucede cuando calentamos un café en el microondas. Muchos habréis oído la historia de alguien que echó azúcar al café recién salido del horno y se quemó la cara. Aunque la historia es exagerada, lo cierto es que en estado metaestable un líquido puede no entrar en ebullición hasta que no encuentra los gránulos que le permiten hervir.
8. Gases pesados
La existencia de unos gases más pesados que otros hace posible la realización de experimentos tan sencillos y maravillosos como éste. Como el gas del interior del recipiente es más pesado que el aire, el barquito de papel de aluminio flota sobre él.
9. Viscosidad
El Efecto Kaye es una extraña propiedad de los líquidos complejos como los jabones de mano, champúes y pintura líquida. Las condiciones de viscosidad de estos líquidos provocan, al verterlos, el chorro de caída se divida en varias partes y comience un raro baile. Otros efectos viscoelásticos son el de Barus y el de Wissenberg. El primero provoca que el chorro de salida del líquido sea más ancho que la propia salida del recipiente. El segundo hace que el líquido ascienda por una varilla si lo giramos dentro de la preparación. Podéis ver los tres efectos en el siguiente vídeo.
10. Polímero superabsorbente
Este producto, comercializado en EEUU como "nieve instantánea, es en realidad un polímero superabsorbente creado por científicos de California, que se expande hasta alcanzar 100 veces su tamaño y generando una sustancia no tóxica parecida a la nieve.
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